Fuente: Lancelot 27-01-84- Nº 53 (pág. 12-13)
La tradición teatral
Se remonta a los años 20 en torno a la iglesia y a la escuela. Como fundadores del teatro están las Hermanas Ferrera, Antonia y Candelaria Cabrera Lemes, Aurelia y Dolores Borges Calero. Margarita Rodríguez Pérez, Nieves Calero Mesa, Domingo Ferrer Mesa y Rafael Martín Bermúdez.
En 1947, siguiendo la tradición familiar, surge de nuevo el teatro que nace en torno a la iglesia con el objetivo de recaudar dinero para la Parroquia. Forman este grupo: Anita Perdomo Albarado, Juana Delgado Morín, María Dolores Mesa Bermúdez, Marita Reyes Bermúdez. María Luz Cedrés Camejo, Juana y María Nieves Ferrer Calero, Ángela Rodríguez Cabrera, Domingo Delgado Morín y José Reyes de León. Cabe destacar a Ángela Rodríguez Cabrera como protagonista y estrella principal del teatro. Se represen tan en esta época «Los líos para sacar el carnet», «El preso número 9», «Señor Chumiso «, «Doña Urraca», etc… Son obras cortas, entremeses de carácter humorístico. Termina este grupo poniendo en escena «La princesa improvisada» y «Jesús, que criada» cuando Ángela Rodríguez abandona el teatro.
En 1.970 surge, en torno a la Parroquia y sólo en la época de Navidad, alguna representación de teatro leído. Pero en 1.973 es cuando empieza el teatro propia mente dicho con la obra «Navidad viviente» de Juan Luis una obra que abarca desde el nacimiento hasta la adoración de los Reyes.
En 1.975 hay un intento de crear un grupo de teatro, pero no acaba de cuajar la idea y todo quedó como una pequeña llama; y continúa el teatro de Navidad. Esta vez con la obra «Navidad hoy», de Luis Marrero Sosa. Una obra que pretende acercar la navidad a los jóvenes de la época.
En 1.976 los jóvenes se hacen cargo de la preparación de la Navidad y elaboran una obra que es adaptación y resumen de varias obras, la » Navidad de los perros». Con ella se p
retende acercar a la realidad de los pastores de la actualidad. Este mismo año se forma el «Club Nueva Juventud». Los jóvenes sienten la necesidad de organizarse, pero esta vez con el objetivo de fomentar la cultura, y surgen muchísimos grupos: Cuevas. Libro fórum, Historia, Poesía, Periodismo, Teatro, etc.
En enero de 1.977 se consolida el grupo de teatro «Los Fragosos» y representan su primera obra: «El médico a palos», de Moliere, con motivo de la Fiesta de Nuestra Señora de la Candelaria, y mantienen un ritmo de actuaciones por distintos pueblos de la isla. Paralelo al grupo de teatro » Los Fragosos», el grupo de teatro infantil del Movimiento Junior.
Este mismo año el grupo se hace cargo de la representación de la Navidad con una obra ya presentada en el año 1.972, motivo por el cual se hace una reflexión seria y profunda. El teatro sacro debe ser una manifestación de fe que ilumine al pueblo.
Y surge en 1.978 la «Navidad marinera», de Julián Rodríguez Rodríguez, como homenaje al hombre del mar. Es el momento de la crisis del Sahara, el acuerdo tripartito, la matanza del Cruz del Mar, los apresamientos, etc. La obra se compone de tres imágenes que resumen y centran el tema. Los versos son oraciones de denuncias y alabanzas, y los villancicos canciones canarias con letra adaptada a las circunstancias.
El Niño de Dios
ha nacido ya,
el que quiera verlo
que venga al Portal.
El éxito y la aceptación popular hacen que se piense en continuar con este tipo de obras.
En 1.979, siguiendo el mismo ritmo de años anteriores se escribe la obra «Navidad campesina», de Juan José Barreto Bermúdez. En ella se recoge la situación de los campesinos con toda la problemática para iluminarla desde el Evangelio. Aquí ya se deja entrever un rechazo a los jóvenes.
El Rancho se niega a participar con la obra de Teatro en la Misa del Gallo. Posiblemente la gente mayor se sintiera desfasada y no encuentran otra forma que boicotear lo que hacen los jóvenes, y esta es la última representación teatral de navidad que se hace.
El grupo de teatro «Los Fragosos» sigue, aunque de una forma esporádica, representando obras tales como «Llama un inspector», «Las cosas de Gómez», Un paleto con talento» y «La tercera palabra». La campaña que se está haciendo en contra de los jóvenes también llega al teatro y queda paralizada, dividiéndose incluso los jóvenes. Durante un año permanece el grupo intentando no rasgarse y en 1.981 se plantea firmemente la necesidad de recuperar el teatro como expresión popular al servicio del pueblo oprimido. Se crean unas bases, se estudia teatro, ex presión corporal, técnicas teatrales, etc. Se empieza a trabajar la obra «El Dragón del pánico», de Julián Rodríguez. Una obra musical en mimo que va a revolucionar la mentalidad del teatro en el pueblo. Una obra que se sale totalmente de lo tradicional para meterse con nuevas formas, símbolos, gestos, música, que va a denunciar la violencia y a aplaudir el amor y el pacifismo. Es puesta en escena en la Sociedad Unión Sur de Tías en Febrero. Se participa en la 3ª Muestra de Teatro de Lanzarote el 18 de Abril de 1.983. En San Bartolomé el día 21 de Abril del mismo año y nuevamente en Tías en Junio del mismo año.
Actualmente se está haciendo un análisis de la realidad para elaborar una obra que recoja la problemática del pueblo y un intento de acercar el teatro a los chinijos. Como primer paso está programado un día de Expresión dentro de la programación de la fiesta de La Candelaria.
HISTORIA DE TÍAS 